sábado, 8 de julio de 2017

Administración de restaurantes: Siete ideas para crear el nombre de tu negocio


Cuando se trata de crear el nombre de un restaurante, se necesita pensar tanto como si se fuera a dar el nombre a un bebé. Este es el que vas a utilizar durante toda la vida del negocio. La forma como llames al restaurante puede contribuir a su éxito. Ese único nombre ayudará a establecer la temática esencial y a identificar el negocio, así como a construir la consciencia de marca.
Lo primero y más importante es determinar tu público objetivo. Ya sea que busques atraer familias, hombres de negocios, personas de la alta sociedad, milénicos o hipsters. El nombre debe estar relacionado con tu base fundamental de clientes. Segundo, necesita representar la marca y el tipo de placer gastronómico que deseas ofrecer. Por último, asegúrate de el nombre sea fácil de pronunciar (los clientes no quieren comer en un restaurante cuyo nombre no puedan decir).

1. Llamarlo por la dirección

En la actualidad, una de las principales tendencias para nombrar un restaurante es utilizar la dirección del negocio. Por ejemplo, puedes nombrar tu negocio 868 porque se ubica en la calle XYZ 868. Esto es ideal porque ayuda a las personas a recordar la ubicación, pero no es tan ideal si tienes planes de abrir un segundo restaurante o convertirlo en una franquicia.

2. Llamarlo por el edificio

Otra gran tendencia es llamar al restaurante por lo que antes solía ser el edificio. Por ejemplo, si un restaurante solía ser un sauna, se le puede llamar “El Sauna”. Esta es una buena idea, ya que puedes incorporar elementos de un sauna, así como parte de la historia del edificio en el diseño o en la decoración del local, y promocionarlo para turistas. Sin embargo, asegúrate de que el edifico y la comida que sirvas tenga sentido. Por ejemplo, si te especializadas en comida japonesa, llamar “El Sauna” al restaurante tal vez no sea muy efectivo.

3. Llamarlo por el plato distintivo

Si te especializas en un tipo de comida, considera incorporar tu plato distintivo en el nombre el restaurante. Por ejemplo, un restaurante que venda principalmente muchos hot dogs, puede llamarse “La casa de los hot dogs”. Esto no solo ayudará a identificar el negocio por lo que vendes con exactitud, sino también ayudará a mejorar los rankings en los motores de búsqueda.

4. Llamarlo por una identidad étnica

Si el restaurante se especializa es un tipo de cocina étnica, tiene sentido darle un nombre étnico. Solo asegúrate de que pueda ser traducido fonéticamente en una palabra española fácil de pronunciar y que los clientes puedan saber con facilidad qué tipo de cocina sirves. Además, asegúrate de que aunque el nombre pueda traducirse en algo con sentido en el español, no siempre puede sonar apetitoso o atractivo.

5. Utilizar un juego de palabras inteligente e ingenioso

Una de la mejores formas de llamar la atención es idear un juego de palabras inteligente para el nombre del restaurante. Un nombre ingenioso también puede ayudar a aumentar los ingresos, ya que puedes promocionar el nombre o marca en polos, gorras, vasos y otra mercadería en venta en el restaurante.

6. Llamarlo por tu nombre

Una de las tendencias más tradicionales es colocar al restaurante el nombre del dueño o de un pariente, como “Las pastas de mamá”. Esta es una buena idea si tienes una gran historia por cantar o una personalidad enorme. Además, funciona mejor si la persona por la cual se ha nombrado el restaurante está en este. Los negocios llamados epónimamente también ayudan a crear mejores relaciones personales con los clientes, ya que evoca la sensación que invitas a los clientes a tu propia casa.

7. Añadir el tipo de establecimiento en el nombre

Siempre es una buena idea añadir algunas palabras identificadoras al nombre del restaurante que ayude a los clientes a determinar qué tipo de negocio tienes. Utiliza palabras como café, pub, restobar, brar and grill, entre otros, para atraer a las personas correctas.

EL MAL PASO DEL GOBIERNO EN TURISMO

Carlos Canales, presidente del Buró de Convenciones y Visitantes de Lima, y ex presidente de la Cámara Nacional de Turismo (Canatur) subraya que el gobierno no tiene norte ni una visión de Estado en turismo. Que Chan Chan desaparecerá en 20 años por falta de presupuesto. Que Dios nos ayude.
Son 6.5 millones de peruanos los que viven en pobreza, según el último reporte del INEI ¿De qué manera el turismo los puede ayudar?  Si bien es cierto los indicadores dicen que hay menos gente en extrema pobreza, aún hay pobreza y eso se palpa más en provincias. Hay que hacer énfasis en el turismo como la actividad económica más dinámica en la generación de empleos. Es la más inclusiva porque requiere gente con menos formación técnica y se ejecuta desde el entorno, sin necesidad de movilizarse mucho. Será un gran dinamizador cuando tengamos como política de estado al turismo.

Entonces ¿cómo se cumplirá su profecía que el 2035 el turismo será la primera actividad económica del país? Tenemos ministros que se alegran por duplicar las visitas a los destinos de siempre, pero callan sobre deforestación, no aplican políticas de reconversión laboral…  Tenemos tempo para lograrlo. Un país se puede transformarse turísticamente en 15 años. Sin embargo, se requiere una política de estado que empodere al turismo como una actividad económica multisectorial y descentralizadora. Si hacemos un análisis, hace 10 años no tenemos políticas de estado y sólo hemos seguido una serie de acciones dispersas que nos permitieron crecer a un rango de 8% siempre pensando en el turismo receptivo…
Cero visión sobre el turismo nacional…Exacto. Es el turismo interno el que debe ser el gatillador de la infraestructura turística de un país, y no hablo de hoteles cinco estrellas, sino de lodges, albergues. Las comunidades rurales podrían acoger a turistas teniendo buenas prácticas. A través del turismo rural comunitario se puede fortalecer las capacidades de los actores locales para que se sientan orgullosos de su identidad, brinden servicios y generen riqueza.

Pero el tema es que son acciones aisladas.- Está en la boca de los políticos, pero no existe una política gubernamental de desarrollo turístico armonioso a mediano ni a largo plazo, y eso se evidencia en cifras. Piensan ampliar a 7 millones el arribo de turistas extranjeros y crecer 50% en los próximos cinco años, pero la cosa debería ser al revés. El turismo interno en México, Argentina o Brasil es 7 veces el receptivo. Si llegan al Perú 3 millones y medio de turistas extranjeros, deberíamos tener 20 millones de turistas nacionales, pero no hay política que articule a todos los actores e incentive el turismo interno.  Y mientras tanto seguimos esperando la segunda pista del Jorge Chávez y aeropuerto colombiano de El Dorado nos sigue sacando ventaja… El 85% de turistas extranjeros ingresa por el Jorge Chávez. Lima es la puerta de entrada al país y quien quiera irse a provincia pasa por ella. Se requiere la segunda pista, pero también sería ideal tener 12 aeropuertos internacionales con vuelos directos a distintos mercados.
Pero de verdad internacionales… Así es. No sólo con el título internacional como en Arequipa o Chiclayo. Las políticas deben ser coherentes, si queremos mover al turista nacional diversifiquemos la oferta aérea porque ahora el 67% de compatriotas se mueve en buses interprovinciales, el 28% en sus vehículos, y sólo 5% por avión. Es una necesidad la segunda pista, pero lo lógico, insisto, es tener varios aeropuertos internacionales con vuelos directos…
Hubo un tiempo que había vuelos directos de Miami a Iquitos, por ejemplo . Claro, por muchos años los hubo con AeroPerú, Faucett y Aero Continente. Podemos retomar ese camino, pero adolecemos de políticas de Estado, estamos en un desarrollo de iniciativas individuales y acciones desvinculadas.
Simples gestos…Exacto, como lo que dijo el presidente de la República sobre duplicar el turismo receptivo, pero no mostró un plan ni un cronograma. Se requieren acciones articuladas entre el sector público y privado.
Hay mucha gente que lo ve como un especialista del sector, pero otro tanto lo critica agudamente. ¿Qué logros tuvo por su paso por la Canatur?
Fui presidente de Canatur por ocho años y pienso que hicimos cosas que transformaron al turismo. Posicionamos a la actividad turística dentro de la economía del país, pues antes se veía como un tema lúdico, cuando es multisectorial. Además, propulsamos tres dispositivos importantes como considerar el turismo receptivo como una actividad de exportación no tradicional y que lo libraba del IGV. Ya el 2001 creamos el Fondo Especial de Promoción del Turismo que pasaba por gravar con 15 dólares cada ticket aéreo para tener recursos para el desarrollo de actividades turísticas. Este año se debería recaudar 90 millones de dólares. Transformamos la promoción del Perú en las principales ferias de turismo. Antes las ferias internacionales daban 50 metros cuadrados para el stand peruano, ahora tenemos 600 y nuestra presencia se multiplicó en las ferias con presentaciones que nos permitieron ganar premios.
La gastronomía tuvo un rol principal… La incorporación de la gastronomía como embajador fue importante. Durante 10 años promovimos a actores culinarios como Gastón Acurio y programas de televisión que generaran identidad nacional de la cual sentirnos orgullosos.
Ahora desde el Buró hemos posicionado a Lima. Antes de nuestro trabajo Lima estaba en el puesto 14 de América, según la Asociación Internacional de Congresos y Convenciones (ICCA). El 2015 obtuvimos el primer lugar de las Américas y el 16 del mundo.
¿Y el centro de convenciones para 300 mil personas? Tenemos un elefante blanco desde el 2011 y esperamos que se solucione pronto. Hay un tema arbitral entre el Estado y la empresa constructora. Ahora, mientras tanto, tenemos un hermoso centro de convenciones en San Borja, pero debemos apuntar a 3 o 4 centros de convenciones. Es increíble que durante 10 años se haya gastado 500 millones de dólares en montar y desmontar infraestructura.
Perú Travel Mart 2017 terminó con casi 7 mil citas de negocios, pero ¿cómo se aterriza y se explican sus consecuencias? Si hablamos de 13 participantes, 150 vendedores y 30 reuniones diarias ente ellos, podemos decir que se han generado posibilidades de contrato estimados en 15 millones de dólares, y que se concretarían en tres años.
En Venecia restringen el número de visitantes para preservarla, pero aquí se celebra que más gente vaya a los destinos de siempre. ¿Qué mensaje le da al gobierno para que no se cometan abusos con algunos destinos y se promocionen otros? Hay que ser sinceros. El Perú tiene destinos iconos y muchos otros que no se conocen, lo que hay que generar es una política de sostenibilidad del destino y uso adecuado del recurso. Para empoderar a otros destinos y dejar que los consolidados sigan corriendo, hay que generar corredores como el que hace 20 años trabajamos en el circuito noramazónico con Huaraz, Chiclayo, Trujillo, Chachapoyas, Moyobamba, Tarapoto, Yurimaguas e Iquitos. Tenemos sitios monumentales como Kuelap, las huacas del Sol y la Luna y Chan Chan.
Pero Chan Chan es una lágrima…Es verdad. No se ha puesto en valor y encima se han reducido los recursos de mantenimiento y hay el riesgo de perderlo en 20 o 30 años.

Y mientras tanto el Ministerio de Agricultura viene parcelando la industria turística. Ahora establece rutas de turismo rural comunitario y le endosa a PromPerú la venta de los destinos…
Yo creo que cada uno debe tener un rol, quien mejor conoce los destinos es el empresario que es quien invierte. Hay prioridades que tienen que evaluarse, instalar una mesa de trabajo entre el sector privado que de imputs para que el Estado concrete estudios y desarrolle infraestructura. El Perú está lleno de recursos turísticos, pero de ahí a transformarlos en atractivos y productos hay una brecha grande.
¿Sirven las cámaras regionales de turismo? Son tejidos empresariales demasiados débiles. No están empoderadas, salvo excepciones, para generar ofertas muy concretas. Hay un conglomerado de cámaras, pero falta visión técnica y que el Estado acompañe. ¿Los gobiernos locales y regionales hacen su trabajo?
No la ven… Ese es el problema y se refleja en el presupuesto. No existe una solo gobierno regional o municipalidad que tenga más del 0,5% para el desarrollo turístico.
Usted mencionó que en el feriado de Semana Santa el turismo cayó 70% y Canatur dijo que solo fue 20% ¿Hay un problema con Canatur? No, para nada. En cuanto a las cifras han tenido que dar marcha atrás y dijeron que la caída fue del 50% Lo que sí sorprendió fueron las cifras del ministro de Comercio Exterior y Turismo que dijo que sólo había una caída del 10% una cifra que es…
Inaceptable  Exacto. Pedro Pablo Kuczynski y su ministro (Eduardo Ferreyros) dicen que los destinos están maravillosos, pero ¿cómo se hacía masivo sin carreteras y con solo el 5% de turistas nacionales viajando en avión? De Lima salen 50 vuelos diarios a provincias con 120 personas por vuelo. Es decir, 6 mil personas por día. Hay que saber medir. Mi proyección no es gratuita, manejo indicadores históricos y reales. Una semana antes del feriado largo, el gerente general de la cadena Aranwa señaló que su hotel en Vichayito tuvo cancelaciones de 90% Y esa fue la realidad de muchísimos hoteles de todo el norte. Es más, los alcaldes de Huanchaco, Colán, Máncora y Zarumilla dijeron que tuvieron una baja del 70%. Y eso obedece a indicadores de transporte. De los 260 mil vehículos que el año pasado salieron al norte durante semana santa, este año sólo hubo 160 mil. Nuestro análisis es técnico, no político.

RUTAS TURISTICAS EN APURIMAC - PAMPACHIRI

  PLAN DE GESTION TURÍSTICA EN EL DISTRITO DE PAMPACHIRI La gestión turística y sus resultados prácticos constituyen parte de la sostenibi...