La actividad
turística es considerada como una las actividades que genera movimiento
económico + el incremento de demanda para profesionales y técnicos
especializado en esta rama a nivel mundial, se sabe que para el año 2020; el
turismo se convertirá en la 3era actividad económica más importante del globo
con más de 3 mil millones de dólares anuales, que lleva a más de 300 millones
de desplazamientos de turistas; es por estos motivos que los gobiernos actuales
del mundo están invirtiendo una gran cantidad de dinero en infraestructura y
desarrollo de nuevos productos turísticos.
En el Perú, se
conoce 09 lugares turísticos entre los cuales están Machupicchu, Lago Titicaca,
Cañón del Colca, Ruta Moche, Líneas de Nasca, Parque de Manu, Lima Histórico,
Rio Amazonas y Montaña de Huascarán, como verán en el turismo no resaltan las
regiones o departamentos sino el escenario geográfico, cultural y natural, el
cual es escenario motivador para que un turista se desplace a nuestro País. Es así
estimados lectores nuestra región de Apurimac no aparece en el escenario
turístico, ya que en estos últimos años
se hablan de turismo, pero sin fundamentos sólidos donde hagamos un factor
de cambio y diferenciador en desarrollar un solo producto turístico
representativo y del cual sea un modelo y motor de la economía regional como de
sus involucrados. Esta problemática tiene sus factores de la cual explicaremos:
¿Por qué no somos competitivos en turismo?
Es la pregunta que
con frecuencia formulan jóvenes universitarios y de institutos educativos del
sector. La respuesta tentativamente global, recurriendo al mecanismo de
subtítulos como las razones que, en nuestra opinión explicamos porque no somos
competitivos en turismo.
Cuestión Académica; hay
pocas excepciones, pero no tenemos investigadores importantes. Las
universidades no alientan la
investigación en sus aulas y esto ocurre como consecuencia de los programas
curriculares inadecuados. Los
directivos de las Escuelas de Turismo no terminan por entender que es el
turismo. Pese a que se trata de un fenómeno de carácter interdisciplinario, no
se justifica que los programas curriculares estén atiborrados de ciertos cursos
poco relevantes que desplazan a otros que si revisten total importancia de cara
al futuro del sector. Un ejemplo que grafica este problema es el dictado de
cursos como Legislación Turística que bien podrían ser materia de un seminario
o dos, pero no de todo un ciclo académico. Cursos claves, y que merecerían más
tiempo de dictado, son Marketing Turístico, Planificación Turística en
Destinos, Gestión de Agencias, Hoteles y Restaurantes, desarrollo Sostenible
del Turismo….es urgente el cambio de curricular acorde con el mercado actual y
lo que necesitan las empresas turísticas, para lograrlo deben ser profesionales
en turismo, eso está claro.
Cuestión Gubernamental;
El principal problema que surgen en las instancias y niveles de gobiernos,
donde se toman las decisiones que afectan el devenir de los pueblos que
apuestan por el turismo, es la ausencia de voces autorizadas y competentes en
materia turística en el entorno técnico-profesional de presidentes regionales,
gerentes, directores de turismo, alcaldes, regidores, etc; no hay presencia de
profesionales de primera línea en turismo. Hay ya lo sabemos que quienes se
introducen en el aparato estatal es por necesidad, mientras que pocos son los
que lo hacen por convicción. Ahí estriba el gran problema del turismo en
nuestro País. Así que recomiendo a las
nuevas autoridades regionales y municipales en colocar personal clave en
turismo.
Cuestión Empresarial; La
única manera de hacer frente a las nuevas tendencias del mercado turístico
mundial, tan globalizado y cambiante, es
por medio de inversiones de conocimiento, desarrollo de talentos, innovación
permanente e investigación de mercados. Hoy, es nuestro campo, las empresas
del mundo están enfocadas a diseñar productos turísticos especializados. Sin
embargo en nuestro país, que posee riqueza y variedad de recursos para crear
ofertas específicas que respondan alas expectativas de distintos públicos,
seguimos ofreciendo lo mismo del siglo pasado. Los empresarios harían bien en
reconocer la necesidad de desarrollar ventajas competitivas para que la región
sea, por fin, ese gran producto turístico
diversificado como ejemplo “El Cañón del Apurimac” del que hablan los
especialistas de marketing. El
empresario de visión estrecha, qué duda
cabe, otra de nuestras desventajas, y quizá la más nociva.
CONCLUSION
Por favor dejemos
de engañar y concentrémonos en lo clave. El crecimiento del turismo no es hacer
eventos costosos sin resultados positivos a largo plazo. Es un trabajo que debe
ir de la mano con el desarrollo de nuestras propias capacidades. Es
directamente proporcional, no al revés.
Innumerables veces
le orientamos a los gobiernos de turno como trabajar el turismo en su jurisdicción,
los mismos que deben apuntar a erigirse en los pilares sobre cuyo trabajo
conjunto se impulse el turismo en la Región Apurimac; ¿Cómo se implementa esto
a nivel técnico? Pues poniendo en valor
e implementado nuestros recursos y atractivos, convirtiéndolos un producto
turístico que a Mi opinión seria “El
Cañón de Apurimac”. Para alcanzar dicho objetivo hay que cumplir con cinco
requisitos; conectividad, infraestructura y servicios, seguridad, cultura
turística y promoción. En ese orden.
Suele suceder que
se invierte el orden de los factores y se comienza por lo último; promocionar
un lugar sin que se hayan cumplido las metas anteriores.